jueves, 21 de marzo de 2013

Relato: De la Gota Mentirosa.

Conversación con ella misma: No te pienses que porque te vea desnudo por ahí por las calles y abandonado a tu suerte me vas a dar pena, no que no te voy a prestar ni una gota de mi brillo ni de mi luz, ( decía la pobre gota al caer de la nube directa al suelo...). Y bueno El Suelo como siempre tan sonriente , no le hacía ni caso, ni caso a la pobre gota que se estrelló.

7 comentarios:

  1. Pobrecilla esa gota...

    Deberíamos erigir una catedral en su memoria.

    ResponderEliminar
  2. La erigí, luego te la presento, creeme, besos.

    ResponderEliminar
  3. Parece que nadie va a donde se le necesita, besos!

    ResponderEliminar
  4. Todo el mundo es necesario, Silvo.

    Hasta la tonta gota que cayó al suelo tan "mentirosilla", hasta eso es necesario. Silvo.

    Hasta el Suelo es necesario, sino , ¿dónde pisaríamos?, estaríamos todos siempre flotando, besos y abrazo.

    ResponderEliminar
  5. A veces somos agua, otras somos tierra... Un abrazo.

    ResponderEliminar